Patrocinado porPatrocinado por

Por qué tener un huerto en casa y cómo hacerlo

OFRECIDO POR VIDAXL

SOMOS AGRO

¿Sabías que en un huerto urbano puedes cultivar verduras, frutas o plantas medicinales? A diferencia de un huerto tradicional que podría requerir de un gran terreno, puedes adaptar un huerto urbano a espacios pequeños como tu balcón, terraza, azotea o patio

26 feb 2024 . Actualizado a las 13:41 h.

Es probable que viendo fotos en redes sociales te hayas topado con la de un pequeño cultivo en el balcón de un departamento en el piso 10 de un gran edificio. ¿Te has preguntado cómo es esto posible?

Pues bien, sin lugar a duda puede tratarse de un huerto en casa que, como su nombre lo indica, es básicamente un cultivo que tienes en un pequeño rincón de tu hogar, ya sea en tu balcón, terraza o incluso en un pequeño espacio en tu patio trasero.

Si los comparamos, la gran diferencia entre tu huerto y un huerto tradicional es que el tuyo es más pequeño y lo has adaptado a un espacio urbano. Así, en lugar de tener un gran terreno cultivado en el campo, utilizas ciertas técnicas para cultivar en casa usando macetas, cajones o incluso en paredes verticales.

Y te preguntarás por qué tener uno. La respuesta es corta: por sus múltiples beneficios y te los explico a continuación.

Beneficios de los huertos urbanos

Si lo vemos desde un punto de vista ambiental, cultivar plantas en casa ayuda a limpiar el aire que respiramos, pues contribuyen en la absorción de carbono lo que reduce los niveles de contaminación. Además, también es más sostenible tener tus verduras en casa que comprar aquellas que viajan miles de kilómetros para llegar a ti.

Otro aspecto importante es que son geniales si se siembran en comunidad. Y es que los huertos pueden ser lugares donde puedes reunirte con otras personas, conocer más sobre esta práctica y compartir conocimientos sobre el cultivo de alimentos. Además, son una excelente manera de aprender sobre la naturaleza y la alimentación saludable.

Por otro lado están los beneficios económicos. Al cultivar tus propios alimentos, ahorras dinero que de otro modo gastarías en el supermercado. Incluso te puede servir para ganar un dinero extra si vendes un poco de lo que cosechas en casa.

Y no vamos a irnos sin resaltar lo saludable que es comer productos cosechados en un cultivo propio, sin mencionar que el acto de cultivar y mantener tu huerto puede contribuir en la salud mental, por lo que hay beneficios por donde se mire.

Huertos urbanos que te servirán de inspiración

La idea de los huertos en casa no es del todo nueva, aunque sí es reciente. Si nos vamos a su historia, encontramos que las personas empezaron a cultivar en casa durante las guerras, donde no solo era peligroso salir, sino que el hambre se hacía sentir.

Desde entonces, se han creado múltiples formas de tener un huerto en casa y, para que te sirva de inspiración, te cuento de las ideas más locas pero exitosas:

  • Huertos en el techo. Las construcciones modernas y amigables con el medio ambiente usan plantas en el techo para ayudar a disminuir el calor dentro del hogar. Algunos restaurantes en múltiples ciudades del mundo también han puesto en tendencia lo que llaman “de la azotea a la mesa”, una práctica en la que cultivan las verduras que preparan cada día.
  • Huertos verticales. ¿Te imaginas un jardín creciendo en la pared? Pues existen. Esta práctica incluso es utilizada en grandes empresas con pequeños espacios para tener cultivos de interior que se plantan hacia arriba. Esta es la mejor forma de economizar espacio o de aprovechar uno pequeño.
  • Huertos comunitarios. Sin duda, estos huertos han revolucionado la forma de vivir en comunidad y han beneficiado a múltiples familias o bien de escasos recursos o bien que se juntan para cultivar en compañía para el beneficio de todos.

¿Qué necesitas para crear tu propio huerto urbano?

Crear tu propio huerto urbano es más fácil de lo que parece, pues para empezar solo vas a necesitar elementos básicos y fáciles de conseguir.

Lo primero y más importante es un poco de espacio. Ya he mencionado que puede ser cualquier rincón de tu hogar, aquí lo más importante es que no lo utilices y que puedes adaptarlo exclusivamente para tu huerto.

También vas a necesitar una entrada de luz solar, pues el sol es vital en el crecimiento de tus plantas (de hecho se considera ideal que estén al sol por lo menos 6 horas al día). Si no tienes mucho sol directo, no te preocupes, pues hay muchas plantas que puedes cultivar en sombra e incluso en invierno.

El agua es otro elemento esencial. Por eso debes asegurarte de tener acceso a ella para regar tus plantas regularmente ya sea con una regadera, una manguera o incluso un sistema de riego automático en caso de que prefieres algo más práctico.

Por supuesto, también necesitarás tierra que sea rica en nutrientes y tenga buen drenaje. Puedes comprar una tierra específica para sembrar en macetas o tierra de cultivo y enriquecerla aún más para tener una buena cosecha.

Por último, pero no menos importante, necesitas semillas. Estas las puedes conseguir en tiendas de jardinería, en línea e incluso en la plaza de mercado. Eso sí, elige plantas que se adapten a tu espacio y clima, luego de eso a sembrar se ha dicho.

Utensilios que te facilitarán crear tu huerto

Ya tienes la lista de elementos esenciales, ahora pasemos a las herramientas de jardinería que te ayudarán a que el proceso sea más fácil de llevar y a que lo hagas como los profesionales.

  1. Macetas y jardineras. Son esenciales para cultivar tus plantas en espacios pequeños. Puedes encontrarlas en una variedad de tamaños y materiales como terracota, plástico o cerámica. Para elegir la apropiada para cada planta debes conocer el tamaño de sus raíces, aunque siempre necesitarás trasplantar.
  2. Mesas de cultivo elevadas. Estas mesas son ideales para quienes prefieren no agacharse tanto al trabajar en el huerto. Son perfectas para balcones o terrazas y te permiten organizar tus semillas y macetas de forma cómoda y accesible.
  3. Regaderas y sistemas de riego. Ya sabes que mantener tus plantas bien hidratadas es fundamental para su crecimiento y salud, por eso debes elegir una buena regadera para distribuir el agua de manera uniforme. También puedes optar por sistemas de riego automático que al final son más cómodos.
  4. Herramientas pequeñas. Un juego básico de herramientas como tijeras, un rastrillo y un par de guantes te facilitará el trabajo en el huerto. También puedes considerar herramientas específicas, como un cultivador de mano o asas pequeñas según consideres necesario.
  5. Soportes y estructuras de cultivo. Son ideales para plantas trepadoras o que necesitan apoyo como tomates o pepinos que necesitan estructuras como enrejados, tutores o jaulas. Esto ayudará a mantener tus plantas erguidas y maximizará el espacio disponible.

¿Qué puedes cultivar en tu huerto?

En el mundo del cultivo hay cientos, por no decir miles de opciones que podrías considerar. Sin embargo, quiero compartirte algunas ideas sobre cultivos que puedes tener en un espacio pequeño:

Hierbas aromáticas. Estas son imprescindibles en cualquier huerto. Puedes cultivar menta, albahaca, perejil, cilantro, romero, tomillo y muchas más. Son perfectas para dar sabor a tus comidas y aromatizar tus platos favoritos.

Lechugas. Son fáciles de cultivar y crecen rápidamente, además, puedes plantar diferentes variedades como la lechuga mantecosa, la lechuga iceberg o la lechuga rizada. Así tendrás ensaladas frescas todo el año.

Tomates cherry. Esta variedad de tomates son ideales para huertos urbanos porque no requieren tanto espacio y producen una gran cantidad de frutos. Además, son deliciosos y perfectos para ensaladas, salsas o simplemente para comer solos como aperitivo.

Fresas. Son una de las frutas perfectas para cultivar en macetas o jardineras. Son dulces, jugosas, llenas de sabor y además son muy decorativas, por lo alegrarán cualquier plato en el que las uses.

Chiles o pimientos. Si te gusta el picante, los chiles o pimientos son una excelente opción que puedes cultivar variedades como jalapeños, pimientos morrones o chiles habaneros, todo según tu preferencia de sabor y picor.

Zanahorias. Están entre las verduras más fáciles de cultivar y no necesitan mucho espacio. Solo asegúrate de tener una tierra suelta y profunda para que puedan crecer rectas y largas.

Espinacas. Las espinacas son ricas en nutrientes y se pueden cultivar durante todo el año. Son perfectas para ensaladas, salteados o batidos verdes.

Cómo saber qué puedes cultivar

Te acabo de dar ideas específicas de verduras y plantas medicinales que podrías cultivar en tu huerto, pero ¿sabes qué debes de tener en cuenta para elegir qué cultivar?

Aunque de entrada es imposible aprenderlo todo, sí que puedes tener una base de conocimientos sobre cómo elegir el tipo de semilla ideal para tu espacio. Así que voy a explicarte los criterios básicos:

Clima y estación. Observa el clima de tu región y la estación del año en la que te encuentras. Algunas plantas prefieren climas cálidos y soleados, mientras que otras toleran mejor el frío. También es importante conocer si la planta que deseas cultivar es de temporada y cuál es la mejor época para sembrarla.

Nivel de cuidado. Considera cuánto tiempo y esfuerzo estás dispuesto a dedicar al cuidado de tus plantas. Algunas plantas como las lechugas o las espinacas son bastante fáciles de cuidar y requieren poco mantenimiento, mientras que otras, como los tomates o los pimientos, pueden necesitar más atención, riego y poda.

Necesidades de luz y agua. Investiga las necesidades de luz y agua de las plantas que deseas cultivar. Algunas plantas prefieren pleno sol, mientras que otras toleran la sombra parcial. Además, asegúrate de poder proporcionar el agua necesaria para mantener tus plantas saludables.

Preferencias personales. Por último, pero no menos importante, ten en cuenta tus propias preferencias y gustos. Elige frutas y verduras que se adapten a tus necesidades culinarias y de consumo.

Tips para cuidar y aprovechar tu huerto

Hemos llegado al final de esta guía y ahora que conoces qué  y cómo plantar, quiero dejarte consejos adicionales para que cuides mejor tu huerto y le saques todo el provecho a tus cosechas:

  • Nutrición del suelo. Asegúrate de que la tierra de tu huerto esté bien alimentada. Para eso utiliza abonos orgánicos o compost que enriquecen la tierra y proporcionan a tus plantas los nutrientes necesarios para un crecimiento saludable.
  • Control de plagas y enfermedades. Mantén un ojo vigilante en tu huerto para detectar cualquier signo de plagas o enfermedades. Actúa rápidamente para controlar cualquier problema, ya sea mediante métodos orgánicos o el uso de productos naturales. La prevención es clave, así que mantén tu huerto limpio y ordenado.
  • Poda y mantenimiento. Realiza podas regulares para promover un crecimiento saludable y controlar el tamaño de tus plantas. Elimina las hojas y ramas enfermas o dañadas para evitar la propagación de enfermedades. Adicional, retira las malas hierbas para evitar competencia por los nutrientes y el agua.
  • Rotación de cultivos. Cambia la ubicación de tus cultivos cada temporada para evitar agotar el suelo y reducir enfermedades. La rotación de cultivos también ayuda a mantener el equilibrio de nutrientes en el suelo y promueve un crecimiento más vigoroso de tus plantas en cada siembra.
  • Aprovechamiento de cosechas. Recolecta tus cultivos en su punto óptimo de madurez para disfrutar de su sabor y frescura máximos. Aprovecha al máximo tus cosechas conservándolas mediante técnicas como el secado, congelación o encurtido. Si se pasan de maduras, úsalas para cremas, mermeladas y compotas.