El Monasterio de Samos conserva en Puerto Rico una comunidad de tres monjes y un colegio de 500 alumnos

Uxía Carrera Fernández
UXÍA CARRERA LUGO / LA VOZ

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Vista aérea del Monasterio de Samos
Vista aérea del Monasterio de Samos CEDIDA

Es la última congregación creada por la abadía lucense en el siglo XIX que sigue activa

26 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Los siete monjes que mantienen al Monasterio de Samos con vida también sostienen los lazos más allá de las paredes de piedra del cenobio. Pese a menguar considerablemente el número de religiosos, la institución samonense todavía conserva algo de su influencia. En Puerto Rico continúa activa una comunidad de tres monjes y un colegio de 500 niños que depende del monasterio lucense. Es la última congregación benedictina en manos de la abadía samonense.

El de Samos es el monasterio más antiguo de España que continúa habitado. Los primeros monjes se asentaron en el siglo VI; a partir del siglo X acogieron la regla de San Benito; por él pasaron los primeros sacerdotes enviados por Alfonso II a Santiago de Compostela para hacerse cargo del culto al apóstol Santiago y a partir del siglo XVI vivió su mayor importancia histórica, cuando nobles, bispos y artistas se hospedaron en él. 

Con la desamortización de Mendizábal el monasterio quedó vacío pero volvió a habitar en 1880 y hasta la actualidad. A finales del siglo XIX y principios del XX, en plena restauración de las congregaciones benedictinas, los monjes de Samos llegaron a distintos puntos de Galicia. En Lugo, recuperaron el Monasterio de San Salvador de Lourenzá, donde se mantuvieron hasta los años 40 del siglo pasado, y el Monasterio de San Vicente do Pino, al que devolvieron la vida monástica hasta los años 80. En la provincia de Ourense, se asentaron en el Monasterio de San Clodio, que abandonaron a finales del siglo XX por el deteriorado estado del edificio. 

Los monjes de Samos, en su afán por restablecer comunidades benedictinas, pasaron las fronteras nacionales y llegaron hasta Puerto Rico. En 1960 enviaron religiosos al municipio de Mayagüez formando allí una congregación. Desde su creación, Lugo y Puerto Rico mantuvieron una estrecha relación, de manera que tanto religiosos locales como los caribeños pasan temporadas en cada uno de los monasterios.

Cuando la abadía lucense fue perdiendo monjes, se trasladaron algunos de los puertorriqueños. De hecho, en el 2016 se nombró prior de Samos a uno de los religiosos del Monasterio de Mayagüez, Gerardo Ibarra. Este puertorriqueño estudió en el Seminario Diocesano de Lugo pero después había regresado a su país natal.

Un colegio de 500 alumnos

Actualmente, es la última de las cuatro comunidades creadas en el siglo XIX por los monjes samonenses que continúa bajo la orden benedictina. En Puerto Rico quedan tres religiosos que, por ser un número bajo, dependen del prior de Samos. Los monjes benedictinos escogen este cargo por elecciones democráticas cada cuatro años siempre y cuando el cenobio tenga un mínimo de miembros. Al ser solo tres, participan en las elecciones del prior de Samos. 

Colegio de San Benito en Mayagüez dependiente del Monasterio de Samos
Colegio de San Benito en Mayagüez dependiente del Monasterio de Samos

En la misma situación está la propia abadía lucense, que, como su propio nombre indica, debería tener un abad como cargo superior. Sin embargo, este cargo vitalicio tiene que ser elegido por doce votos, pero ya no llegan a ese número. 

Junto a la pequeña comunidad benedictina, en Mayagüez la orden también cuenta con el Colegio San Benito, que tiene más de 500 alumnos. Esta escuela depende de la misma manera del monasterio de Samos. Los estudiantes puertorriqueños pudieron viajar en alguna ocasión hasta la localidad lucense para visitar la abadía que fundó su centro. 

En los últimos años, la vida monástica de Samos y, por extensión, la de Mayagüez ha vuelto con fuerza al «ora et labora», el enunciado que resume la vocación de la orden de San Benito. En el cenobio del Camino Francés, centrado en la atención a la ruta jacobea y en Puerto Rico, al ámbito educativo.